Ley REP, Comité Estratégico y Decreto de Envases y Embalajes, las transformaciones a nivel país en favor de un Chile sustentable y con economía circular al 2033
Una buena forma de entender la economía circular es compararla con el modelo tradicional de producción, a saber, explotar recursos y transformarlos, para luego vender, usar y desechar. Por el contrario, la economía circular busca reducir la generación de residuos y, en el caso que estos existan, valorizarlos, transformarlos y/o reutilizarlos.
Por esta razón, este modelo económico es una nueva forma de aportar a la misión de empresas sostenibles y con una visión sustentable, porque su aplicación no solo beneficia al medio ambiente, sino también a la generación de más empleos verdes y nuevas formas de competencia.
La Economía Circular fomenta el reciclaje gracias a que promueve un modelo de producción donde la mayoría de los residuos son reutilizados, aprovechando mejor los recursos disponibles y la mercancía generada. Al operar de esta manera ,el flujo de materias primas se reduce y con ello también se optimiza el uso de energía y los gastos en la disposición final.
En Chile, el mundo académico, empresarial y gubernamental han colaborado para impulsar medidas que apuntan a mejorar las condiciones socioambientales en la relación de las empresas con el medioambiente y la comunidad. En este contexto aparece la Ley 20.920 «Marco para la gestión de residuos, la responsabilidad extendida del productor y fomento al reciclaje», más conocida como la Ley REP, y cuyo objetivo principal es aumentar las tasas de valorización de residuos (reciclaje) a través de determinados instrumentos de gestión ambiental.
Este novedoso instrumento de gestión económica de los residuos de la región latinoamericana, obliga a los productores de los denominados «productos prioritarios» a organizar y financiar la gestión de los mismos hasta el final de su ciclo de vida.
En acciones concretas, el pasado 11 de mayo se dio inicio al Comité Estratégico de la Hoja de Ruta de Economía Circular, impulsada por el Ministerio del Medio Ambiente y el Ministerio de Economía. Esta media propone cuatro pilares que sustentan las mejoras al modelo de producción actual en Chile: obtención de materias primas, producción, consumo y servicios, gestión de residuos.
Durante la presentación del Comité Estratégico, la ministra Schmidt señaló que la «transición de una economía lineal a otra circular significa un cambio de paradigma, y requiere de una transformación enorme en nuestras formas de producir y también de consumir. Es por eso que decidimos liderar la construcción de una hoja d eruta, invitando a un grupo transversal de organismos que nos ayuden a definir metas y objetivos concretos para hacer de Chile un país circular» (MMA).